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lunes, 5 de mayo de 2014

El ser humano es nostálgico por naturaleza...

Para mi hay 2 lenguajes universales. El primero queda reducido a la comunicación mediante los elementos básicos de una tabla periódica. Y el segundo es quizás el más extendido por su simpleza y alto poder evocador, la música.

La música es universalmente el lenguaje más poderoso a la hora de representar sensaciones, sentimientos, recuerdos, estados de ánimo, lugares e incluso formas de ser de las personas. Esa combinación de melodía y armonía hace que quien más o quien menos despierten en nosotros todo lo listado. Sin embargo, ¿cuando una canción se nos convierte atemporal?
Es curioso reparar en que todas esas canciones que te han gustado a lo largo de tu vida, hay veces que quedan reducidas a un tercer plano cuando llegan otras nuevas a sustituirlas. Sin embargo, esas canciones que quedan ahí, esas canciones que te ponen la piel de pollo a pesar de que haga décadas que las escuchas, son las que podemos considerar atemporales. Nunca jamás encontrarás canciones que actúen de sustitutas.

Yo siempre he tenido una predilección clara en mis gustos musicales. Adoro las B.S.O, y tengo 2 grupos musicales como favoritos. Sin embargo, tengo que reconocer que a nivel nostálgico y atemporal, las canciones que más me marcaron fueron las ochenteras que me rodeaban de crío. Y teniendo en cuenta que soy una persona con una marcada sensibilidad, la nostalgia es algo que siempre tengo a flor de piel. A pesar de que procuro que las sonrisas sean el pan mío de cada día.

Es por ello que 2 de mis canciones atemporales favoritas son de los 80. La primera, la conocí como COVER de una serie de dibujos que veía de txiki (The Racoons - Los mapaches). Una canción de 1988 (el mejor año de mi vida, cuando allá por Abril naciera la segunda mujer que más quiero). El tema era interpretado por Lisa Lougheed y se llamaba "Run with us". Y aunque en la INTRO y el ENDING de los dibujos esta canción no salía como tal, sí que fue mostrada en algún corte de publicidad que hacían antaño en las cadenas de TV poniendo videoclips musicales. Huelga decir que me encantó. ¡Fijáos en ese pelazo! ¡¡Ochentero a más no poder!! (Como comentario Russell adicional -Gracias Crowie por acuñar este término-, Lisa Lougheed daba voz a Lisa Mapache; uno de los mapaches protagonistas en la versión original de los dibus.)



La segunda canción, y quizás la más importante entre mis canciones nostálgicas atemporales favoritas de los 80 es por supuestísimo la interpretada por la mujer de la voz rasgada: Bonnie Tyler (Sergia Dalmo pa'los amigos). Cantando así mi tema favorito titulado "Holding out for a hero". La que la gente comunmente llama "I need a hero".

Esta canción me ha tenido enamorado siempre. No solo por su ritmo pegadizo y potente. No solo por esa inconfundible e incombustible voz. Si no porque cuando ponían las barracas en la plaza Josu Murueta (cuando la misma era un descampado de suelo de gravilla), en el desaparecido "Tren de la Bruja" (en adelante sustituido por el "Dragón") solían ponerla a todas horas. Nunca supe su nombre. Solo conocía la canción por como sonaba (y resonaba de puta madre). Tampoco entendía lo que decía la cantante. Pero eso siempre me ha dado igual, ya que toda mi vida he basado mis gustos musicales en lo que me evoca la melodía. Con lo cúal es posible que me gustasen y me lleguen a gustar canciones en idiomas que desconozco y que hagan apología del nazismo, racismo y exterminio de personas porque sí. Si la melodía es buena, me importa bastante poco la letra. Con "Holding Out For A Hero" me sucedía algo similar. Cuando escuchaba esta canción se me ponía la piel de pollo y sufría un subidón de adrenalina. Tal como me sucede ahora con determinadas canciones en las B.S.O. Y cuando llegó mi película infantil favorita llamada CORTOCIRCUITO 2 y esta canción formó parte de la escena de persecución final descubrí lo que la palabra CLÍMAX representaba en el diccionario. (Click aquí para leer la entrada publicada).



Siempre he sido así. Siempre me ha cautivado el sonido. A pesar de que pueda reconocer que hay letras increiblemente profundas dignas de admirar, soy de los que piensan que si quiero letras, me leo un libro. A mi dadme melodías. Si estas me provocan sensaciones, ya han hecho el trabajo para el que fueron creadas.

En el único caso en el que hago la excepción de admirar la letra es en el Hip Hop. Que a pesar de ser un ámbito que me gusta más bien poco, la gracia de este, está en sus letras. Y es por ello que tendría que hablar de las canciones de mi hermano. Pero no lo voy a hacer en esta entrada porque aqui hay un segurata que no le va a dejar entrar por no ser canciones de los 80. KAR KAR KAR!!! Más o menos como sucedió en el primer concierto que diste en el Gaztetxe... ¡Puto gorila el que no te dejó pasar!



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miércoles, 29 de febrero de 2012

Nightwish - Imaginaerum. "El León ha curado sus heridas y ha regresado al 200%"

Disco 1:
1. Taikatalvi
2. Storytime
3. Ghost River
4. Slow, Love, Slow
5. I Want my Tears Back
6. Scaretale
7. Arabesque
8. Turn Loose the Mermaids
9. Rest Calm
10. The Crow, the Owl and the Dove
11. Last Ride of the Day
12. Song of Myself
13. Imaginaerum

Disco 2:
Mismas canciones en versión INSTRUMENTAL.

Valoración:
Lo mejor que he escuchado de mi grupo predilecto desde ONCE.

Ahora bien, vamos con el comentario:

Aunque el disco ha visto la luz en Diciembre del 2011, ha sido hace 3 semanas cuando lo he escuchado finalmente. Lo sé, lo sé, "menudo fan de mierda estoy hecho!!". No obstante, a nivel musical he estado en periodo de latencia escuchando y llenándome de música orquestal proporcionada por los inconfundibles 2 STEPS FROM HELL. Así que llegado el momento oportuno, me hice con el disco de Nightwish. IMAGINAERUM como se ha llamado finalmente para diferenciarse del resto de grupos que usaban IMAGINARIUM como emblema.  Y desde luego ese primer punto lo han cumplido con creces, ya que si buscas IMAGINA (sin pulsar enter)... en GOOGLE, no hay búsqueda anterior de IMAGINAERUM. Con lo cúal como elemento diferencial del resto ya lo han bordado.

Ansioso, activo la reproducción esperándome un nuevo DARK PASSION PLAY. Y cuan GRATA, GRATA, GRATISISISISISIMA ha sido mi sorpresa cuando he descubierto que NADA MÁS LEJOS DE LA REALIDAD. Este disco es la muestra sonora de que el Rey León ha regresado con más fuerza que nunca tras su herida de muerte cuando la portentosa soprano Tarja Turunen fue expulsada de Nightwish hace ya seis años por Tuomas Holopainen. Ese día lo recuerdo como si fuera hoy. Estaba trabajando cuando esa mañana un compañero me vino con la noticia que me dejó más que sorprendido. En aquel momento, temí el incierto futuro que se le avecinaba al quinteto finlandés. Sobretodo porque desde su primer disco, a nivel internacional han sido el máximo exponente de un movimiento que lo hace único e inequívoco al oído. Metal Melódico de tintes Goth, Power y solista femenina al frente. Hoy día hay otros muchos grupos que siguen esta tendencia hasta tal punto que la agotan insondablemente y sin reparación.

En fin... Aquí me tenéis con la primera reproducción de todas las canciones y la piel de pollo presente desde el principio hasta el final de un DENSO disco de más de 75 minutazos. Cuando publicaron “Dark Passion Play”, disco del que seguí la pista desde el primer día, estaba acogonciado todavía por el resultado del cambio de solista. Y es que Tarja, es mucha Tarja. Se mire por donde se mire. No obstante compensaba ese temor confiando plenamente en la calidad que desprende Nightwish por todos sus costados. Pero siempre con un ojo avizor de no saber como le iba a sentar el cambio. Así que, el día que hicieron la presentación oficial y pude escuchar el disco al completo en versión PREMIERE con cortes directamente de la radio finlandesa, confirmé que Nightwish no había muerto y se sentía su poder en cada canción. Sin embargo sí que reconozco que había un algo que no había cuajado del todo en ese cambio. Detalle que achaqué a la falta de costumbre de escuchar una voz distinta al frente de las canciones; y no le dí más importancia de la debida. El grupo seguía siendo el mismo y requeriría del periodo de adaptación por parte de sus fans.



Muchos fans de Nightwish en época Tarja, dejaron de lado al grupo tan pronto escucharon el disco, aludiendo que en los conciertos tenían ese poder de convocatoria por inercia y fama. Otros fans nuevos que llegaron cuando Anette entró al grupo decían que "el grupo era mucho mejor ahora que antes". Y luego estábamos los fans que dejando de lado prejuicios nos concentrábamos en las melodías presentadas y lo que las mismas nos provocaban. Y os lo aseguro. Aún es el día que este grupo me sigue poniendo la piel de pollo. Y eso solo me pasa cuando algo me cautiva y me emociona de verdad. Películas, videoclips, canciones, videojuegos con gran argumento... ARRRRRRRRR!!!

Total, que tras 4 años (que se dice pronto) tras DARK PASSION PLAY, ya tenemos entre manos el nuevo disco de los finlandeses. Y tengo que reconocer OBJETIVAMENTE (quitando mi pasión, o no pasión) que la escucha del mismo revienta cualquier duda y/o incógnita que hubiese sobre el estado de NIGHTWISH. El rey de la jungla ha curado sus heridas y ha salido de caza de nuevo con una nueva leona. Que si bien no ruje como la leona anterior, ha conseguido evolucionar y desarrollar su fiereza hasta tal punto que te hace pensar que este DISCAZO tenía que haber sido el que salió en vez de DARK PASSION PLAY. Más que nada porque recupera TODO EL ESPÍRITU que el genial disco de ONCE (en el 2005) soltara en pleno estruendo musical.

En fin...
En pleno 2012, a momento de escritura de estas palabras, muy atrás queda el trauma de la separación. El Rey se ha curado reapareciendo potenciado y demostrando una vez más que nunca renunciará a sus raíces y su buen hacer, en pos de la innovación que muchos pensaban que buscaban. Talento y buen hacer que ya quedó demostrado desde el primer disco "ANGELS FALL FIRST" (1997) en la época de la leona Tarja. Ganándose más seguidores con el grandioso OCEANBORN (1998 y uno de mis favoritos junto a CENTURY CHILD y ONCE). Y rugiendo para quedarse con WHISMASTER, hasta alzarse de nuevo con el poder  de la jungla en ONCE. Aunque para los más nostálgicos es muy posible que piensen que los nuevos discos no llegan al nivel de esas primeras etapas. Pero yo me doy con un canto de gominolas en los dientes. Es un orgasmo auditivo para mis oídos escucharlos. ARRRRRRRRRRRR!!!!!!!!!

La leona Anette ha aprendido y mejorado mucho en estos años de conciertos. Y reitero lo dicho: el talento de la banda vuelve a salir a la palestra obligándome a dejar de lado; durante una buena temporada; cualquier otro grupo musical que estuviera escuchando en estos momentos.

Ahora mismo, lo que ansío de veras es la llegada de la película basada en el concepto que presenta el disco. Sobretodo porque si por algo me gusta Nightwish, es por ese grandísimo componente cinematográfico que arrastra y que se acentúa con cada disco nuevo que sacan. De hecho, podréis llamarme HEREJE o TURBIO si queréis, pero algunos de los puntazos musicales de este nuevo disco recupera los toques del potente órgano de Tuomas recordándome que la primera canción que conocí del grupo fue una versión metalera de la canción CRIMSON TIDE. Canción originalmente introducida como parte de la O.S.T en la película LLAMARADAS (Backdraft) de mi actor favorito Kurt Russell, y versionada años más tarde en la película DEEP BLUE SEA.
Años después llegaría un excompañero de trabajo (saludos Javi); que sabiendo lo que me molaba el guitarreo y las O.S.T de películas; cambió mi vida musical presentándome integramente el trabajo de este fenómeno musical. (Ironías de la vida que tuviera la versión de DEEP BLUE SEA hacía años y nunca hubiese buscando información de ellos).



Las canciones... ¿qué decir de las canciones sin que se me ponga la piel de pollo? Es el único grupo del que puedo reconocer con total sinceridad que me gustan TODAS y CADA UNA de sus canciones en todos sus discos, ediciones especiales y canciones para diferentes países. Habrán melodías que me gusten más que otras. ¿Pero que no me gusten? Ninguna que esté escuchando en este momento será pasada a la siguiente salvo que me apetezca escuchar otra determinada.
Y además, en este disco; al igual que con ONCE en el 2005; cada canción a su modo; lleva una ligera e íntegra conexión musical con la siguiente, por lo que las sensaciones que te transmiten las canciones van ligadas entre sí. Formando un conjunto de sentimientos que no conseguirías obtener de forma individual.

Tengo que reconocer que me encantan los poderosos timbales de la cinematográfica "ARABESQUE". Es la típica canción que yo escucharía si voy a correr. Me encanta la voz de Anette en la canción "TURN LOOSE THE MERMAIDS". Donde nos demuestra; una vez más; que ha evolucionado y que tenemos por fin a una Anette a la altura.
Hay canciones de corte relajado y melódicas; para luego subir y recuperar el pulso en las grandiosas "GHOST RIVER", "STORY TIME", "REST CALM". Canciones con toneladas y toneladas de instrumentos, sello de la marca de la casa. Y finalizando que lo de tener una canción introductoria es una gran muestra de lo que se nos presentará a lo largo de este; ya lo he dicho; denso, denso disco.

Quizás como fan, no tengo esa visión objetiva que debiera tener para hacer una buena crítica. Así que, como fan fiel diré que a este disco lo único que puedo achacarle es lo mismo que al anterior. Echar de menos los punteos melódicos y cuidados de Emppu Vuorinen, tal como solíamos tener en los discos anteriores. De hecho, tengo que reconocer que este tipo aparte de un gran músico, es todo un showman.

Tras el concierto de ONCE en Pamplona durante los SAN FERMINES del 2005 en la Karpa Rojilla, me quedó claro. Y lo reconfirmé años más tarde en el concierto de DARK PASSION PLAY en la sala Santana 27 el pasado 2008.

De este disco adoro todas las melodías. Pero si me obligaran a quedarme con una, es muy posible que esa fuera "I WANT MY TEARS BACK" por el cuidado dibujo de la gaita presente en la música celta que tanto admiro. También muy posible que fuera "SCARETALE", ya que es canción que se sale de la escala. Y en esta Anette sobresale cantando como si fuera una malvada bruja de cuento; muy a pesar de los grititos; acompañada también por un inquebrantable Marco Hietala que vuelve a dejar claro su gran poder histriónico. Presente en el grupo desde el fabuloso disco CENTURY CHILD.

VAAAALEEEE, VAAAALEEEE cansin@s!!! Me tiro a la piscina y escojo una...

Si me tengo que quedar con una canción de todo el disco sin lugar a dudas... Por encima de todas, que ya es decir, esa sería "LAST RIDE OF THE DAY". Es mi vida... Mi estilo musical definido a la perfección... Una canción épica con gran carga coral... Y muchos instrumentos de fondo acompañados por unos potentes rifts de guitarra y las voces de Marco y Anette complementando todo el conjunto. Es una pieza que empieza fuerte, se relaja como diciéndote "prepárate" y explota en un estribillo abrumador que se te quedará pegado durante días. Canción con un marcado y recordado estilo ONCE que tanto había echado de menos desde mi añorada "GHOST LOVE SCORE" que tributé en un vídeo con escenas de la carga de Rohan en la película "EL RETORNO DEL REY".


CONCLUSIÓN: Nightwish ha regresado para quedarse con un disco densísimo al que vale la pena dedicar unas cuantas horas... Muuuchas horas... Muchíiiiisimas horas. En total son otros casi 75 minutazos más de vida musical que añadir a nuestras vidas. Y eso, sin contar el segundo disco con las versiones INSTRUMENTALES del primero. Os lo recomiendo encaricedamente, no dejéis pasar la oportunidad de haceros con el disco. Decir que merece MUCHO la pena es quedarse corto.
 



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